En la actualidad los paneles solares requieren un mantenimiento mínimo para garantizar que sigan funcionando correctamente y produzcan energía solar de una manera eficiente. El mantenimiento más común de los paneles solares es la limpieza debido a que la suciedad y los escombros pueden acumularse en los paneles, especialmente en los cambios atmosféricos, por ejemplo, durante las tormentas o períodos prolongados sin lluvia. La limpieza ocasional puede eliminar estos desechos y garantizar que los paneles solares reciban la cantidad óptima de luz solar. En este artículo te explicamos cómo limpiar un panel solar y en este otro, cómo aumentar la eficiencia de los paneles.
Otro tipo de mantenimiento común que se debe realizar de manera preventiva es la inspección anual. Durante la inspección de paneles solares, un profesional cualificado revisará parámetros de la instalación para verificar que ésta cumple con los requisitos de la normativa vigente.
Por otro lado, nos encontramos con el mantenimiento correctivo, el cual será dado cuando surja algún problema que tengamos que resolver inmediatamente. Hay que puntualizar que este mantenimiento suele darse si no se ha llevado un mantenimiento preventivo de forma adecuada.
En resumen, el mantenimiento de los paneles solares es muy mínimo. En general, hay tres tipos básicos a tener en cuenta:
- Inspección anual: una vez al año, un técnico cualificado tendrá que ir a revisar ciertos aspectos técnicos para verificar que la instalación se encuentra correctamente, por ejemplo, la tensión a la que se encuentran los paneles.
- Limpieza: en general, los paneles necesitan una limpieza semestral. Sin embargo, es posible que solamente se necesite una limpieza por año si la instalación se encuentra en una zona de lluvias abundantes y donde los paneles solares no acumulan mucha suciedad o escombros. Por otro lado, si la instalación se encuentra dentro de una zona de pocas lluvias, por ejemplo, las Islas Canarias, donde abunda la calima (polvo en suspensión) probablemente se tendrá que planificar limpiezas de manera más habitual sobre los paneles solares.
- Mantenimiento correctivo: este mantenimiento tendrá lugar si se da alguna anomalía en la instalación.
En la mayoría de las instalaciones, los paneles solares fotovoltaicos no necesitarán más mantenimiento que el de las inspecciones y la limpieza regular. Sin embargo, hay señales de alerta a tener en cuenta que podrían indicar que los paneles requieren mantenimiento antes de lo programado.
El indicador perfecto que nos indica que los paneles solares necesitan de mantenimiento es la reducción en la producción de energía solar. Si los paneles no producen tanta energía como lo hacen normalmente y la factura de la electricidad aumenta considerablemente, tendremos un buen indicio de que algo no va bien, y por lo tanto, será recomendable llamar a un técnico especialista para que averigüe de qué problema se trata.
En cuanto al coste del mantenimiento de los paneles solares, varía considerablemente dependiendo del tipo de instalación y la cantidad de paneles. No es lo mismo realizar el mantenimiento de grandes plantas fotovoltaicas que una placa fotovoltaica básica en un hogar. Tampoco cuesta lo mismo realizar el mantenimiento en una cubierta no transitable donde se necesitará grúas elevadoras, que en una cubierta transitable donde solo hará falta un operario.
Los costes anuales promedio de mantenimiento solar para una instalación en un hogar se encuentra en unos 200 – 300 euros, incluyendo las dos limpiezas y la inspección anual del personal cualificado.
Sin embargo, los costes pueden ser más altos si hay daños en el sistema de los paneles fotovoltaicos o si la limpieza es más frecuente debido a la suciedad o los desechos que se acumulan rápidamente.
El precio dependerá exclusivamente de la empresa que se contrate, incluso hay algunas empresas que ofrecen un cierto número de visitas de mantenimiento en la compra de los paneles solares. Otros ofrecen un servicio que cubra el mantenimiento y las limpiezas regulares.
Los paneles solares vienen con garantías en las que el fabricante garantiza que los paneles durarán una cierta cantidad de años. Las garantías suelen durar entre 10 y 20 años, dependiendo del fabricante. Fundamentalmente estas garantías garantizan que los paneles solares no caerán por debajo de cierto nivel de rendimiento. Por otro lado, cubrirán daños inesperados a sus paneles solares por tormentas y otras causas fuera del control.
Sin embargo, un dato a tener en cuenta es que la garantía del panel solar puede estipular que estos solo están cubiertos si reciben el mantenimiento adecuado. Por ejemplo, si no se limpian los paneles con regularidad y los desechos se acumulan constantemente se acortará la vida útil de la instalación, y probablemente la garantía no cubrirá el mantenimiento y la sustitución de los paneles.
